Un San Nicolás en París
Me da vergüenza contar esto, pero es una buena historia. Hace dos días iba caminando por París. Andaba cerca del Arco del Triunfo, por una calle de tiendas y hoteles lujosos, cuando un italiano, desde un coche, me llamó. «Eh tú. ¿Puedes acercarte?». Pensé que estaba perdido, que necesitaba una indicación, y que era una buena oportunidad para ayudar a alguien y sacar a relucir, de paso, algunas palabras de mi pobre repertorio en italiano. Pero el tipo no estaba perdido y me salió con la siguiente historia: – Ah, eres argentino. Perfecto. Porque entre italianos y argentinos nos entendemos. Además el Papa Francisco me cae muy bien, así que te voy a hacer un regalo. Mira. Acabo de terminar con una exposición de ropa aquí en París. Tengo que volver a Italia en 3 horas. Debo devolver este automóvil de alquiler y tomar el avión. Pero no puedo llevarme toda esta ropa de vuelta. Es mucho peso y no tengo espacio. Además, es ropa que la empresa ha regalado para la exposición y creo que los dos nos podemos beneficiar de ello. ¿Me entiendes? Son 3 camperas de piel original que cuestan 1000 euros cada una. Dame 100 por …